Por Milenio.com
07/07/2011

Ciudad de México - El secretario de Hacienda, Ernesto Cordero, aseguró que “no es mi intención generar polémica”, tras ahora ser criticado por sus declaraciones ayer sobre la recuperación del poder adquisitivo del salario mínimo.

En los últimos meses Ernesto Cordero ha sido por sus declaraciones sobre el gasto familiar de seis mil pesos, o que México dejó de ser un país pobre pero con problemas de pobreza.

En entrevista con Ciro Gómez Leyva, para Radio Fórmula, insistió en que lo dicho por él ayer “no quiere decir que hayamos recuperado toda la pérdida que se tuvo en los años 80 y 90. No quiere decir que con un salario mínimo pueda vivir bien un trabajador”.

Sin embargo, el funcionario federal destacó que es hasta esta última década donde “hay una recuperación muy modesta de salario mínimo” en términos de poder adquisitivo, que desde luego, dijo, no compensa todo lo que perdimos 20 años atrás.

En la actualidad, refirió, “un salario mínimo es un salario insuficiente, no hay ninguna duda de esto”.

Un salario mínimo es un salario insuficiente, no hay ninguna duda de esto
- Ernesto Cordero

Antes, con Joaquín López Dóriga, el secretario de Hacienda invitó al gobernador del estado de México, Enrique Peña Nieto, a participar en un debate en el que ambos aborden los avances de la última década en materia de salarios.

“Cuando él quiera, acepte debatir para compartir, para discutir y comparar lo que son 70 años de gobiernos priístas, contra 10 años de gobiernos panistas, si tu quieres en tu programa donde él quiera, donde él se sienta a gusto con mucho gusto platicamos y contrastamos los resultados de gobierno", dijo.

Peña Nieto sostuvo hoy que tiene "exactamente la visión contraria del secretario de Hacienda", por lo que no hay recuperación de salarios en México, y sí desafíos como el reparto equitativo de la riqueza y garantizar un mínimo de satisfacciones para los mexicanos, con salud y vivienda.

Sin embargo, Cordero Arroyo refrendó en la entrevista el compromiso de la administración federal con los mexicanos que más lo necesitan, como demuestra el incremento en los programas de política social, la cobertura universal de salud y becas para familias pobres.