Entre rabia, impotencia, frustración y conmoción se mueven los sentimientos de los aficionados argentinos tras la eliminación de la Albiceleste en los Cuartos de Final de la Copa América 2011 a manos de su acérrimo rival, Uruguay.

El torneo donde partía como principal candidato al título por estar en casa y tener el plantel más llamativo de entre todos los participantes, Argentina le abonó más peso a la carga de decepciones acumuladas de 1993 a la fecha.

Ya son 18 años llenos de fracasos para el cuadro argentino, pues desde que obtuvo el título de la Copa América de 1993 imponiéndose a México en la Final, no ha vuelto a ganar un torneo importante con su representativo mayor.

“Fracaso Nacional”, tituló el diario Olé la nota principal en su edición digital. “Ni con Messi…”, agregó el principal periódico deportivo de este país en otra información, haciendo alusión a que “el mejor del mundo se comprometió con la Selección pero no pudo marcar la diferencia, tampoco logró convertir su gol, van 16 partidos sin un grito oficial con la celeste y blanca. Otra decepción para Leo”.

Es que una de las mayores quejas entre el público argentino es que la gran estrella del futbol mundial, Lionel Messi, cuando juega por su Selección se convierte en un jugador distinto al que luce y marca la pauta en el Barcelona.

Hay quienes le cargan toda la responsabilidad de este tropiezo, y el del Mundial pasado, y el de la Copa América anterior, y así para atrás desde que defiende la camiseta nacional.

“La Argentina se encomendó a una lotería y salió espantada”, indicó el portal canchallena.com; mientras que La Nación cabeceó “Una gran decepción; la Selección se fue de su Copa América en los penales”.

Las caras de tristeza y enojo predominaron en los bares, restaurantes y sitios públicos de Buenos Aires donde se dio seguimiento televisivo al encuentro que se llevó a cabo en la provincia de Santa Fe, y hubo hasta quienes derramaron lágrimas por que una vez más una plantilla repleta de figuras argentinas no logró el objetivo.

Eso de ser campeón a Argentina se le ha ido olvidando, trata de vivir del recuerdo de 1978 y 1986, cuando alzó la Copa del Mundo en casa y en México, respectivamente, y del torneo continental en su edición de Ecuador 93, su más reciente éxito en competencias de Selecciones absolutas.

Las cadenas de televisión dedicaron hasta dos horas después del encuentro a analizar y tratar de encontrar explicaciones a la derrota frente a Uruguay, que se dio en definición por penales tras un empate 1-1 en tiempo regular y alargue.

“Fernando Muslera fue la figura”, fue la frase que más se repitió en los programas deportivos, refiriéndose al portero charrúa, quien fue determinante en el triunfo celeste. Y si en la capital de Argentina el evento no había prendido del todo debido a que no se programó ningún partido en Buenos Aires sino hasta la Final y ahí esperaban los seguidores de esta localidad a su equipo, ahora el ambiente es de luto porque se quedaron con las ganas de ir al Estadio Monumental para apoyar a la Albiceleste.

“El sueño argentino murió en los penales”, fue la cabeza para la crónica del duelo entre argentinos y uruguayos en el diario El Clarín, que siendo de información general puso como nota principal la eliminación del cuadro dirigido por Sergio Batista.

“La historia de Tevez empezó mal y terminó peor”, señaló el mismo periódico en una nota secundaria donde destacó que aclamado de manera unánime para verlo en la cancha “terminó errando el penal decisivo en la definición”.

Luego prácticamente todos los medios de comunicación se hicieron eco de las declaraciones del “Checho” Batista, quien afirmó que esto no se trató de un fracaso pues él apenas lleva unos meses de trabajo y su principal objetivo se centra en el próximo Mundial de Brasil 2014.

Como si la afición no necesitara de algo más que el propio resultado para sentirse mal aparece el técnico para no reconocer lo que entre la gente se dice abiertamente, que Argentina fracasó en “su” Copa América.

Y mientras los argentinos están conmocionados por la eliminación tempranera de la Albiceleste, los uruguayos se han dado vuelo celebrando en un sitio tan representativo de este país que hasta pareció un desafío para sus vecinos. El Obelisco, ubicado sobre la principal avenida de Buenos Aires, la 9 de Julio, fue tomado por charrúas entusiastas que gritaron la victoria enfrente de los dolidos bonaerenses.

Por Mediotiempo.com.mx