En lugar de estar destruyéndonos entre nosotros mismos, Pável Pardo planteó que este es un buen momento para lograr la unión del futbol mexicano y que se establezcan programas a largo plazo, que se nombre a la brevedad al técnico nacional, que jugadores y federativos tengan más disciplina y profesionalismo y que se le de la misma importancia al aspecto deportivo que al negocio.

Aseguró también que los 13 seleccionados sancionados no están solos y que muchos de los jugadores estamos con ellos.

Y si la Federación Mexicana de Futbol planea congelar a los firmantes de la carta, advirtió que juegue con la selección sub 23 porque, por ejemplo, yo no aceptaría ir... aunque de todas formas ni me llaman, agregó entre risas.

El americanista observó que actualmente en la FMF la mercadotecnia y el negocio están sobre el futbol, pero tienen que ir de la mano. Se ha trabajado bien el marketing y ha entrado buen dinero. Se ha explotado bien la imagen de la selección, pero es momento de ver qué pasa con el futbol. No es posible que en este momento no se haya nombrado un técnico. El dinero es importante para sostener las selecciones, pero no hay que olvidar lo deportivo.

Preguntó el por qué se juegan 10 partidos en Estados Unidos, cuando se podrían jugar sólo cinco y tres en Europa y dos en Sudamérica.

Pável reiteró que se trata de un momento trascendental para lograr la unión del medio, pero que debe ser sobre las bases de que cada uno asuma su responsabilidad y compromisos.


Pavel Pardo lamentó que la mercadotecnia y el negocio están sobre el futbol, pero reconoció que tienen que ir de la manoFoto Reuters
“No se vale exhibir a los jugadores y decir que son culpables de todo –observó—. Este tema de la fiesta se manejó mal, debió tratarse de manera interna, y el responsable es Néstor, el director de selecciones. Los jugadores tienen que pelear sus derechos, pero también, y lo dije desde que regresé de Europa, les falta profesionalismo. Todos tenemos que crecer, ser más disciplinados, tanto jugadores como dirigentes y creo que aquí el tema importante es la planeación. Hay que dialogar y llegar a un acuerdo de qué es lo mejor no para el jugador ni la federación, sino el bien para la selección. Si los jugadores y los dirigentes nos cambiamos el chip, será otra cosa”.

Después de su experiencia en Alemania, un país con mentalidad ganadora, se dio cuenta que en México tenemos envidia, no reconocemos los éxitos de otros y lo más fácil es hablar mal y parece que estamos yendo para atrás.

Criticó a los medios informativos que sólo se preocupan por chismes, por si fuiste a bailar y no por tu rendimiento en la cancha, aunque aceptó que los jugadores sabemos que nos tenemos que cuidar o no vamos a rendir y nos damos cuenta de lo que está bien y lo que está mal. Uno fue joven y también comete errores. La vida te da golpes y vas aprendiendo y cada uno debe asumir su responsabilidad. Si el jugador cometió un error lo tiene que pagar porque el reglamento se tiene que cumplir.