Por segunda vez desde que inició el juicio en su contra el pasado 3 de agosto por corrupción, abuso de poder y la muerte de más de 800 manifestantes durante los 18 días de protestas que llevaron a su caída, ayer el ex presidente egipcio, Hosni Mubarak, postrado en una camilla, compareció ante un tribunal de El Cairo donde reiteró su inocencia por las acusaciones en su contra.

Un debilitado Mubarak, de 83 años, llegó en helicóptero trasladado de un hospital de la capital egipcia donde se encuentra desde su primera comparecencia el pasado 3 de agosto. Después fue introducido a la jaula de los acusados en una camilla acompañado por sus dos hijos, Gamal y Alaa, también procesados pero sólo por cargos de corrupción.

El ex mandatario egipcio vestía overol azul y sus dos hijos uniformes blancos de la prisión. Como en los juicios tradicionales en Egipto, los detenidos se encuentran dentro de una jaula de metal para acusados.

SEPTIEMBRE. Alaa, su hijo menor y que también es enjuiciado junto a él, cubrió una cámara de la televisora del estado que tomaba imágenes de su padre cuando era sacado de una ambulancia para ser trasladado a la sede del juicio.

Poco después se informó que el juicio contra Mubarak continuará el próximo 5 de septiembre, sin que en adelante sea televisado.

COMBINADO. El juez Ahmed Rifaat anunció que el tribunal volverá a reunirse el 5 de septiembre para escuchar las declaraciones y ordenó que el juicio, que era transmitido en directo por varios canales y en las pantallas gigantes fuera de la corte, ya no sea televisado hasta la sentencia.

Al final de la sesión, la segunda de este juicio histórico, el juez también ordenó que el juicio de Mubarak sea combinado con los procedimientos contra su ex ministro del Interior, Habib al Adly, cuyo juicio había sido aplazado hasta el próximo 5 de septiembre.

Por Cronica.com.mx