Damasco - Tanques sirios atacaron por segundo día consecutivo la ciudad de Hama, escenario de una masacre en 1982, matando a al menos cuatro civiles, dijeron residentes, en una de las jornadas más sangrientas en los cinco meses de la revuelta contra el presidente Bashar al-Assad.

Las muertes en el distrito residencial de Hamidiyah llevaron a 84 el número de víctimas civiles en la ciudad del centro del país, donde el padre de Assad aplastó una rebelión islámica hace 29 años y mató a miles de personas.

"Nadie puede irse de la ciudad porque las tropas y (la milicia pro-Assad) shabbiha están disparando al azar con ametralladoras", dijo un residente, que se identificó como Raed.
Los tanques sirios también atacaron la localidad de Albu Kamal, en el este, luego de dos semanas de asedio, indicaron activistas de la región. En tanto, el ejército intensificaba sus ofensivas en la provincia tribal de Deir al-Zor, que limita con el corazón sunnita de Irak.

Las fuentes agregaron que un hombre, Ibrahim al-Mashadani, murió cuando los tanques ocuparon el centro. Residentes dijeron que los tanques rodearon Albu Kamal el 17 de julio, luego de que miles de personas, entusiasmadas por las deserciones en el Ejército, salieron a protestar contra Assad.

Los últimos incidentes se dieron a la par del inicio del mes sagrado de ramadán, en el que los musulmanes creyentes ayunan durante el día.
Residentes dijeron que al menos 29 civiles murieron el fin de semana en un ataque con tanques en Deir al-Zor, la capital provincial.

"Los bombardeos se concentran en los barrios del norte. Los tanques están avanzando hacia el centro", informó un testigo.

Nuevas sanciones de la UE

La Unión Europea amplió el lunes sus sanciones contra el gobierno de Assad, aplicando la congelación de activos y un veto de viajes a cinco personas más vinculadas con la sangrienta represión a la disidencia.

Al anunciar la medida, la jefa de Política Exterior de la UE, Catherine Ashton, advirtió que podría haber más sanciones "si los líderes sirios persisten en su actual rumbo".
También estuvo de acuerdo con que el Consejo de Seguridad de la ONU celebre una sesión de urgencia sobre Siria el lunes y dijo que el organismo debería actuar. Italia y Alemania pidieron la reunión, pero Gran Bretaña descartó una intervención militar extranjera.

La aprobación formal de nuevas sanciones, redactadas por los 24 gobiernos de la UE la
semana pasada, se produce luego que el bloque acusara a Siria de una "masacre" indiscriminada de civiles en la localidad de Hama el fin de semana.

Reed Brody, portavoz del organismo Human Rights Watch, criticó a países como Rusia, China, Sudáfrica, India y Brasil por bloquear sanciones de Naciones Unidas.
"Estos países tienen sangre en sus manos", dijo, añadiendo que el pueblo sirio estaba pagando el precio de lo que se percibía como una intervención extranjera "interminable" en Libia.

Rusia y China previamente se opusieron a condenar a Siria en el marco del consejo, donde tienen poder de veto. Pero Moscú sugirió un cambio de postura el lunes.
"Moscú está seriamente preocupada por la información sobre numerosas víctimas", dijo el Ministerio de Relaciones Exteriores ruso. "El uso de la fuerza contra civiles y representantes de las estructuras del Estado es inaceptable y debe cesar", agregó.

Las fuerzas de seguridad, dominadas por la minoría alauita a la que pertenece Assad, sitiaron Hama, una ciudad musulmana sunnita de 700 mil habitantes por casi un mes antes de iniciar el operativo del domingo.
En una carta al Ejército, Assad reiteró que Siria afrontaba una conspiración extranjera para desatar una lucha sectaria y "dividir al país en pequeños pedazos que compitan para satisfacer a aquellos que trabajaron para separarlos".

La masacre de 1982 en Hama generó tanto temor que pocos sirios se vieron dispuestos a desafiar abiertamente al mandato de la familia de Assad hasta este año, cuando muchos fueron inspirados por las revueltas mayormente pacíficas que derrocaron a los gobernantes de Egipto y Túnez.

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dijo que estaba conmocionado por la "horrenda" violencia del Gobierno sirio contra los ciudadanos en Hama y prometió trabajar con otros países para aislar a Assad.

Por Milenio.com